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¿Por qué repito los mismos patrones? Familias, apego y relaciones desde la teoría biosocial y DBT

¿Sientes que tus relaciones siguen un mismo guion una y otra vez? No estás solo. Es más común de lo que parece encontrarnos repitiendo patrones relacionales: amistades que terminan igual, parejas que detonan nuestras emociones más intensas o relaciones familiares marcadas por la incomodidad o el conflicto.
Para quienes viven con desregulación emocional, estas experiencias pueden sentirse especialmente dolorosas, incluso inevitables. Pero ¿por qué sucede esto?

En este artículo te compartimos una mirada comprensiva desde la teoría biosocial y la Terapia Dialéctica Conductual (DBT), que nos ayudan a entender cómo nuestro entorno temprano y nuestras características personales se entrelazan para moldear la forma en que nos vinculamos.

Tipos de familia: el entorno temprano importa

Nuestra manera de relacionarnos se construye, en gran parte, dentro del contexto familiar en el que crecimos. Y no se trata solo de la estructura (nuclear, extendida, monoparental), sino del clima emocional y el grado de validación que experimentamos.

  • Familias invalidadoras: minimizan, ignoran o castigan las emociones. Frases como “estás exagerando”, “no llores por eso” o “eso no es para tanto” son comunes.
  • Familias sobreprotectoras: aunque buscan cuidar, pueden dificultar el desarrollo de habilidades para afrontar el malestar.
  • Familias caóticas o impredecibles: con límites, normas o afecto cambiantes, generan inseguridad emocional.

Estas dinámicas suelen dar forma a lo que en DBT se denomina un ambiente invalidante, que puede amplificar una vulnerabilidad emocional ya presente.

Tipos de apego: la base de nuestras relaciones

Desde la teoría del apego, las primeras experiencias con nuestros cuidadores moldean nuestras expectativas en los vínculos. Algunos estilos comunes son:

  • Apego seguro: confianza en que los otros estarán emocionalmente disponibles.
  • Apego ansioso: temor constante al abandono y necesidad de aprobación.
  • Apego evitativo: autosuficiencia extrema y dificultad para conectar emocionalmente.
  • Apego desorganizado: combinación de miedo y deseo de cercanía, frecuente en contextos traumáticos.

Patrones relacionales en la desregulación emocional

Cuando hay dificultades para regular las emociones, estos estilos de apego pueden intensificarse y generar vínculos conflictivos. Algunas señales de esto incluyen:

  • Relaciones muy intensas que se tornan inestables rápidamente.
  • Miedo profundo al rechazo, con conductas de sobre acercamiento o aislamiento repentino.
  • Dificultades para expresar necesidades emocionales de forma clara y asertiva.

La teoría biosocial en DBT explica estos patrones como el resultado de una interacción entre una vulnerabilidad emocional biológica (hipersensibilidad, reactividad, dificultad para calmarse) y un ambiente que no valida ni enseña cómo manejar esas emociones.

¿Cómo ayuda la DBT?

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La DBT no busca señalar culpables, sino comprender el origen del sufrimiento y ofrecer herramientas para generar cambio. Desde este enfoque, trabajamos en:

  • Reconocer patrones familiares y de apego desde la compasión, no el juicio.
  • Aprender habilidades para regular emociones, comunicarse de forma efectiva y tolerar el malestar.
  • Construir entornos, internos y externos, que ofrezcan validación.

Una nueva forma de vincularte es posible

En DBT Medellín entendemos que, detrás de la desregulación emocional, suele haber una historia de dolor no reconocido. Pero también creemos profundamente en la posibilidad de transformar ese sufrimiento en relaciones más sanas, auténticas y compasivas.

¿Sientes que repites los mismos patrones en tus vínculos? Tal vez este sea el primer paso para mirarte con nuevos ojos. Estamos aquí para acompañarte.

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